Deterioro del sistema digestivo
A medida que envejecemos, el sistema digestivo típicamente sufre cambios por lo general negativos. Por supuesto, la velocidad y profundidad de estos cambios depende de muchos factores tales como la genética, el estilo de vida y la nutrición.
La siguiente ilustración resume muchos de estos cambios o deterioro del sistema digestivo:
By BruceBlaus - Own work, CC BY-SA 4.0, https://commons.wikimedia.org/w/index.php?curid=57309988
Aunque este cuadro es típico en personas de la tercera edad, cada vez mas lo vemos en personas mucho mas jóvenes debido a la alimentación prevaleciente en restaurantes de comida rápida (“Fast Food”) y estilos de vida poco saludables.
Tomando las medidas adecuadas, este deterioro puede pararse y hasta revertirse. En artículos siguiente hablaremos de medidas que se pueden tomar para revertir este cuadro.
Síntomas típicamente asociados con el sistema digestivo
La siguiente ilustración muestra en anaranjado los síntomas más típicos o frecuentes que asociamos con el sistema digestivo. No necesariamente los padecemos todos a la vez. A veces, por ejemplo, solo tenemos diarrea o constipación, acompañada de dolor abdominal.
Puede que sea ocasionalmente, cuando nos damos un festín, o comemos algo en particular (¿lechón a la varita?). Pero con el tiempo, si la frecuencia y el dolor aumentan, nos damos cuenta de que la tendencia no es buena, que nuestra salud o por lo menos la digestión, está empeorando.
Cuando mas pronto comencemos a escuchar a nuestro cuerpo, la acción necesaria para corregir la situación será mas fácil, menos costosa y el deterioro será menor.
Quizás no nos demos cuenta, pero es posible que ya estemos sufriendo una inflamación leve, pero crónica, de la cavidad abdominal. Una forma de comprobarlo es haciéndose un examen personal, como nos lo hacían los médicos de antes. Acuéstese en la cama sin camisa y ropa interior, y con los dedos presione en distintos puntos su abdomen, debajo de las costillas y el ombligo. Haga esta prueba varias veces y determine cada vez en una escala de 0 a 10 (donde 10 es un dolor bien fuerte) cuanto dolor siente, y en que área del abdomen.
Si no siente ningún dolor o no mas de un nivel 1-2 (difícil de determinar) pues siga observando periódicamente. Si le duele, aunque sea leve (a menos que se esté apretando bien duro) es posible una señal de que el área está inflamada. Dolor frecuentemente observado de 3-5 o mas es posible indicador de inflamación crónica.
La inflamación crónica es peligrosa porque esta asociada con enfermedades autoinmunes, cáncer, diabetes, etc. Con mucha frecuencia empieza con problemas del sistema digestivo, y principalmente por el desarrollo de permeabilidad del intestino delgado (Leaky Gut).
Otros Síntomas / Autoinmunes
En la ilustración de arriba hay un recuadro para Otros Síntomas / Autoinmunes. Y es que la investigación cada vez mas nos dice que enfermedades crónicas / autoinmunes empiezan con el deterioro del sistema digestivo, la ingesta de toxinas en los alimentos procesados, y la mala nutrición. Así que hace sentido en agrupar estos síntomas bajo la rúbrica del sistema digestivo.
La lista de síntomas autonmunes posiblemente relacionadas con problemas digestivos y de alimentación esta basada en el libro de:
Le invitamos a que escuche a su cuerpo, y si evalúa que posiblemente tenga inflamación crónica, no deje de tomar acción para corregirla. Las consecuencias pueden ser muy negativas a la larga si lo ignora.