Inflamación y el sistema inmunológico
Inflamación, que literalmente significa que el área esta en fuego, es uno de los mecanismos básicos que utiliza el sistema inmunológico para combatir bacterias, hongos, virus y otros elementos foráneos que pueden penetrar al cuerpo por distintas vías, muchas veces por una herida o lesión.
- El sistema inmunológico utiliza radicales libres para inflamar el área de la lesión, la cual observamos ponerse roja debido a la inflamación.
- El oxigeno dentro del cuerpo se divide en átomos con electrones no pareados, y por lo tanto inestables, llamados radicales libres. Estos átomos / moléculas inestables que les falta un electrón, buscan otra molécula para robarle un electrón, y así lograr estabilidad. En el proceso extraen un electrón de otra molécula, convirtiendo a esta, en otra molécula inestable que necesita un electrón, provocando así una reacción en cadena, lo que es común dentro del cuerpo.
- En el proceso, la inflamación no solamente ataca bacterias, virus, hongos, etc. en el área de la lesión, sino que también daña tejidos buenos.
- Inflamación, oxidación y dolor van de la mano. El dolor no solo ocurre por la lesión original, sino porque la inflamación en sí afecta el sistema nervioso en el área, lo que nuestro cerebro registra como dolor.
- Normalmente el Sistema inmunológico procede a neutralizar los radicales libres mediante anti-oxidantes una vez domina el trauma o la infección (posiblemente utilizando mecanismos adicionales como anti-cuerpos, células tipo T, etc.). Tras esta neutralización de la inflamación, el tejido del área poco a poco a su normalidad si no ha ocurrido mucho daño.
- Sin embargo, muchas veces necesitamos ayudar al cuerpo a controlar la inflamación rápidamente, ya sea porque el dolor es insoportable, o porque queremos evitar que tejidos buenos se afecten, mientras combatimos la infección de otras maneras (antibióticos, etc.).
En artículos subsiguientes presentaremos distintas maneras de combatir el dolor de forma natural, muchas de las cuales van dirigidas a reducir o eliminar la inflamación.
Dolor Crónico
El anterior proceso describe lo que sucede en el caso de una herida o lesión que causa un trauma o dolor agudo (de relativa corta duración – horas, días o semanas). Sin embargo:
- Si la inflamación no se paraliza neutralizando los radicales libres, ya sea porque la causa que provoca la inflamación no se domina y se elimina, o por que la causa se repite continuamente, el daño es acumulativo y tanto el dolor como la inflamación que lo causa pueden volverse crónicos, afectando las membranas de las células y hasta estructuras internas a las mismas incluyendo, posiblemente, sus genes.
El dolor crónico, indicador de una inflamación continua, es mucho mas dañino y peligroso a la larga que el dolor agudo (asumiendo que este último se puede eliminar una vez se corrija su causa o lesión). Una lesión, digamos un doblez de tobillo, puede convertirse en un dolor crónico si no se atiende y se corrige. Con el tiempo los tejidos (músculos, ligamentos, etc. alrededor de la herida se degradan siendo mas difícil recobrarse, y mas continuo el dolor.
Inflamación Crónica Generalizada
Pero aun mas peligrosa para la salud es la inflamación crónica generalizada a nivel bajo, afectando todo el cuerpo, que pasa desapercibida, excepto por episodios ocasionales donde estalla. Es “el dolor que no se siente”.
Miles de estudios han comprobado que esta inflamación crónica contribuye significativamente a numerosas enfermedades autoinmunes como cáncer, arteriosclerosis, Alzheimer, diabetes, etc.
En este articulo (aquí) exploramos las causas de esta inflamación y cuales pueden ser sus consecuencias para la salud. En este otro articulo (aquí) continuamos describiendo como diagnosticar la incidencia y nivel de inflamación generalizada, y que hacer para controlarla, y eliminarla.